El Presidente de la Nación abrió las sesiones ordinarias en el Congreso. En un discurso de casi dos horas, Alberto Fernández le habló al país para repasar una primera etapa de gobierno marcada por la pandemia del coronavirus y planteó los ejes de su gestión de cara al 2021.

La Asamblea Legislativa se adaptó a los protocolos por el coronavirus. Solo hubo 90 diputados y senadores presentes y los invitados, entre ellos los ministros de la Corte Suprema y los gobernadores, siguieron el acto virtualmente.

Sentado a un lado de la vicepresidenta Cristina Kirchner, el mandatario propuso una “reflexión colectiva”. “Hace un año traía la voluntad de poner de pie a un país sumido en la pobreza por las políticas de los años previos. Solo 10 días después, la Organización Mundial de la Salud decretó la pandemia del Covid-19”, marcó, y sostuvo que en Argentina esa crisis sanitaria coincidió con “un escenario de extrema debilidad económica y social”.

“Argentina estaba endeudada como antes jamás lo había estado. El sistema de salud estaba quebrado, dejaban vencer vacunas y permitían pasivamente la diseminación de enfermedades que creíamos desterradas”, dijo sobre el mandato de Mauricio Macri.

Sobre las críticas por la gestión de la pandemia, reprochó a quienes “reclamaban cuidar la rentabilidad antes que la salud” y a los que lo “acusaban de ser parte de un complot universal”. “Tuvimos y mantenemos una voluntad inquebrantable: la lucha contra el coronavirus fue más extensa y ni un solo día bajamos los brazos”, marcó.