Aunque la inflación muestra signos de desaceleración, el costo de vida en Argentina sigue siendo un desafío para todos los sectores de la sociedad. Mientras que un profesional ejecutivo necesita $6.601.662 al mes para mantener su nivel de vida, una familia tipo (dos adultos y dos menores) precisa al menos $1.024.435 para no caer por debajo de la línea de pobreza, según los últimos datos del INDEC.
Esta brecha evidencia las marcadas diferencias económicas entre distintos sectores de la población y la enorme distancia entre la realidad de los altos ingresos y la de los hogares que apenas logran cubrir sus necesidades básicas.
Dos realidades económicas bien distintas
El informe de la Canasta del Profesional Ejecutivo (CPE), elaborado por la Universidad del CEMA, establece que el nivel de gasto de un profesional de altos ingresos supera en más de seis veces el valor de la Canasta Básica Total (CBT), que determina el umbral de la pobreza.
Por otro lado, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que define el límite de la indigencia, cerró diciembre en $449.314, con un aumento del 2,3% mensual y 86,7% interanual. En comparación, un ejecutivo debe destinar casi 15 veces ese monto para sostener su nivel de consumo.
El impacto de la inflación en cada sector
Si bien los aumentos se desaceleraron en términos interanuales, ambos sectores sufrieron la inflación en 2024:
- La CPE registró un alza del 120,3% interanual, impulsada principalmente por educación (+156%) y vivienda y servicios básicos (+174,8%).
- La CBT subió 106,6% en el mismo período, con incrementos constantes en alimentos y servicios esenciales.
A pesar de que las cifras muestran una desaceleración, el costo de vida sigue siendo un problema creciente en Argentina.
Distintos tipos de hogares, distintas necesidades
El INDEC también desglosa los valores de la CBT y la CBA según el tamaño familiar:
- Una familia de tres integrantes necesita $357.706 para no ser indigente y $815.570 para no caer en la pobreza.
- Un hogar con dos adultos y tres hijos pequeños requiere $472.579 para cubrir solo alimentos y $1.077.480 para costear todos los bienes y servicios básicos.
Esto muestra que, independientemente del nivel de ingresos, el costo de vida en Argentina sigue en niveles elevados y afecta a todos los sectores de la sociedad. La diferencia es que mientras un ejecutivo debe afrontar aumentos en rubros como esparcimiento y salud privada, una familia de clase media o baja lucha mes a mes para pagar alimentos y servicios esenciales.