La actividad industrial en Argentina continúa mostrando signos de fragilidad, según los resultados de la Encuesta de la Unión Industrial Argentina (UIA). A pesar de ciertos indicios de mejora en comparación con el mismo período del año pasado, el Monitor de Desempeño Industrial (MDI) sigue en zona de contracción, revirtiendo la tendencia alcista que se había observado en los últimos relevamientos.

Producción y ventas en retroceso

El informe revela que el 42,3% de las empresas encuestadas sufrió una caída en su producción, superando ampliamente al 18,3% que logró aumentarla. En cuanto a las ventas internas, el 44,8% de las compañías registró una baja, frente a un 22,2% que experimentó mejoras. En el sector exportador, la situación tampoco fue alentadora: solo el 14% de las empresas incrementó sus envíos al exterior, mientras que el 31% reportó una reducción.

El empleo, con dificultades para sostenerse

Si bien el empleo suele tener menor estacionalidad que la producción y las ventas, la encuesta refleja que el 17,6% de las empresas redujo su dotación de personal en enero, superando al 11,5% que logró aumentarla. Estos datos marcan un retroceso respecto al relevamiento anterior, cuando el 17% de las empresas había incrementado su plantilla y el 14,2% la había reducido.

Costos de producción, la principal preocupación

Uno de los puntos más críticos del informe es la preocupación por los costos de producción, que desplazó a la caída de la demanda como el principal problema señalado por las empresas. El 40,6% de los encuestados mencionó que los costos representan su mayor desafío, con un aumento de 15 puntos porcentuales respecto al relevamiento previo. Entre los factores que más impactan en este aspecto se destacan los costos salariales y el encarecimiento de materias primas e insumos.

Expectativas moderadas a futuro

Pese a la situación actual, el informe señala que menos empresas perciben un empeoramiento respecto al año anterior. Sin embargo, las expectativas para los próximos meses se han moderado: el 61,7% de las empresas cree que su situación mejorará, un descenso en comparación con el 67,8% que tenía esa percepción en la encuesta anterior. A nivel sectorial, el 58,1% prevé mejoras (antes 68,1%) y, a nivel país, el 68,6% espera un mejor panorama, frente al 75,5% del informe anterior.

Competencia desleal y evasión, otros factores de presión

El contexto industrial también se ve afectado por la competencia desleal. Un 63,5% de las empresas reportó impactos negativos por precios de dumping en productos importados, mientras que un 33,4% señaló afectaciones por el contrabando. Además, la evasión impositiva y la informalidad son factores que preocupan al sector.

Inversión y utilización de la capacidad instalada

A pesar de la coyuntura, el 57,6% de las empresas considera que es un buen momento para invertir en maquinaria y equipo, lo que indica cierta apuesta a la recuperación. La utilización de la capacidad instalada, en tanto, promedió el 58,8%, con un 67,9% de empresas operando por debajo de sus niveles óptimos.

El panorama industrial argentino sigue mostrando desafíos importantes, con una contracción en la producción y las ventas, dificultades en el empleo y un aumento en los costos operativos. No obstante, la menor percepción de deterioro y la intención de inversión reflejan que el sector mantiene expectativas de una recuperación en el mediano plazo. La evolución de la economía y las políticas industriales serán clave para definir el rumbo en los próximos meses.