Estudiantes de Río Cuarto, el club que vio crecer y retirarse a Pablo Aimar y logró el ascenso a Primera

Después de 40 años sin pisar la Primera División, Estudiantes de Río Cuarto logró el ascenso y jugará en la Liga Profesional durante el próximo 2026. Y a la lógica alegría de muchos cordobeses por haber conseguido este logro de ganar el Reducido también se le sumó la de un integrante del cuerpo técnico de la Selección Argentina, quien tiene un vínculo muy cercano con el club.

Se trata de Pablo Aimar, hoy ayudante técnico de Lionel Scaloni en la Mayor, quien se formó en las Inferiores de este club de su ciudad natal y que terminó retirándose con la camiseta del León del Imperio, institución que hace más de un año le puso el nombre del Payaso a su nueva ciudad deportiva.

El Payaso, que hoy vive un gran momento como miembro fundamental dentro de la estructura técnica de la Scaloneta, siempre estuvo muy identificado con este conjunto cordobés que volverá a Primera. Allí, el hábil mediocampista que brilló en River, en el Valencia y en el Benfica dio sus primeros pasos futbolísticos.

Tal y como contó en reiteradas ocasiones, Aimar jugó en Estudiantes hasta sus 15 años, cuando recibió el llamado proveniente de Núñez y se fue a la gran ciudad, donde terminó de desarrollarse futbolísticamente en las Inferiores del Millo, club con el que finalmente debutaría en 1996, a sus 16 años.

Pasada toda su carrera futbolística, en la que pasó por Valencia (2001-2006), Real Zaragoza (2006-2008), Benfica (2008-2013), Johor Darul Takzim (2013-2014) y River (2015); Aimar decidió volver a su ciudad natal para así poder jugar un puñado de minutos en el club de sus amores.

Un 23 de enero de 2018, el Payaso finalmente se puso la camiseta de Estudiantes de Río Cuarto y jugó, por primera vez, un partido oficial representando a su club. En este duelo frente a Sportivo Belgrano, que servía de clasificación para la fase inicial de la Copa Argentina y terminó con la eliminación para el local luego del empate sin goles, el Payaso sumó 50′ en cancha durante un partido que también fue especial por haber jugado en su ciudad y junto a su hermano Andrés.

Terminado este único encuentro con la camiseta del León del Imperio, Aimar dijo: «Se termina una etapa acá. Ellos me acompañaron para todos lados y les quiero agradecer profundamente. También a mis viejos, a mis hermanos, a la gente de Río Cuarto. Sé que vino Marcelo Bielsa y es una emoción enorme para mí que él haya venido. Me despido en la cancha, jugando y en mi ciudad, con mi hermano, con la camiseta de Estudiantes. Es como quiero. Me hubiese gustado ganar, pero tenía estas cosas jugar por algo, no inventar algo diferente. Me encantaría seguir vinculado al club».