“Las imputaciones se realizaron luego de verificar que estas empresas habrían incumplido la intimación a incrementar su producción hasta el más alto grado de su capacidad instalada y arbitrar los medios a su alcance para asegurar su transporte y distribución con el fin de satisfacer la demanda, establecida por la resolución 100/2020”, informó Comercio Interior en un comunicado.

En rigor, esta resolución, que establece el marco legal para la implementación de los Precios Máximos; “tiene como finalidad proteger a las y los consumidores de posibles abusos en los precios y garantizar el normal abastecimiento de productos en supermercados”.

Durante las fiscalizaciones realizadas en comercios, inspectores de la Subsecretaría “identificaron algunos faltantes en góndolas de productos de consumo masivo”.

Los detalles

A partir de esta evidencia, “se realizaron inspecciones en las oficinas administrativas de diversas empresas proveedoras. Esto que derivó en distintos requerimientos de información sobre stocks e inventarios durante noviembre y diciembre de 2020, y enero de 2021”.

“Del análisis de la información remitida por las empresas se comprobó una importante caída de la producción o en la distribución de diversas gamas de productos”, indicó el área que conduce Paula Español.

Las marcas y sus productos

Por ejemplo, en la empresa multinacional Unilever, que elabora alimentos, artículos de limpieza e higiene personal, “se detectó una caída de casi el 100% en su inventario de aderezos”, precisó Comercio Interior.

En la multinacional alimenticia Danone, por su parte, “se corroboró una disminución relevante en la producción y despacho de quesos cremas y postres durante el trimestre relevado”.

En la compañía multinacional Procter & Gamble (P&G), que elabora productos de limpieza y para el cuidado personal, “se identificaron una reducción importante en el stock de varias presentaciones de productos de marcas emblemáticas de pañales y detergentes”.

La panificadora y elaboradora de pastas Fargo “también evidenció una reducción en el stock de diversas presentaciones de ravioles y ñoquistapas de empanadas y de pan lactal en todas sus variedades”.

En aceites, la empresa local Aceitera General Deheza (AGD) “acreditó una baja de inventario en su totalidad de marcas y presentaciones”.

En la empresa Molinos Río de la Plata “se relevó una importante reducción de inventarios de harinas, productos a base de arroz, arroz y aceites”.

Bunge, compañía global de agronegocios, “también se corroboró una baja en el despacho de aceites envasados y una variación negativa de stocks de harinas”.

Por último la láctea Mastellone, la distribuidora de golosinas Potigian; la empresa regional de alimentos agroindustriales Molinos Cañuelas y el frigorífico Paladini “no aportaron la información con el detalle requerido para realizar un análisis completo de imputadas por este motivo”.

“Se verificó una reducción de la producción o en la distribución de alimentos, bebidas, productos de higiene personal y limpieza que incumplen con lo establecido en la resolución 100 y modificatorias. Las imputaciones intiman a las empresas para que en el plazo perentorio de 5 días hábiles acredite ante la Subsecretaría de modo fehaciente haber dado cabal cumplimiento a la norma. Además se les requiere que restablezcan los niveles de stock registrados a noviembre 2020; y arbitren las medidas conducentes para asegurar el transporte y provisión de los productos para su efectiva comercialización”, remarcó Comercio Interior.